Sin productos químicos: el robot Delta destruye las malas hierbas con un zapper

La aplicación:

El primer robot deshierbador del mundo sin químicos para el control de las malas hierbas en los cultivos de cereales, fabricado por la empresa de tecnología agrícola Small Robot Company, ha identificado y controlado con éxito las malas hierbas en un ensayo de campo en Hampshire. El robot utiliza brazos robóticos Delta para colocar un zapper y utilizar rayos láser para eliminar la maleza.
Se eligieron los robots drylin Delta por su precisión, rentabilidad y funcionamiento sin lubricación.
El robot desbrozador, llamado Dick, trabaja con un robot de vigilancia llamado Tom para identificar las zonas con malas hierbas y eliminarlas con un zapper.

El problema:

En la actualidad, se suelen utilizar productos químicos para eliminar las malas hierbas, por ejemplo, rociando zonas enteras con pesticidas. Un residuo costoso, con efectos nocivos para el medio ambiente.  Los herbicidas y la compactación dañan los suelos, con una disminución del rendimiento de los cultivos.
Los sistemas automatizados de control de las malas hierbas que deben eliminarlas a nivel de cada planta deben ser extremadamente precisos. Y no solo eso; los componentes también deben ser resistentes a la intemperie para soportar el barro y las salpicaduras de agua.

La solución:

El robot Delta sigue a otro robot de vigilancia que utiliza la inteligencia artificial para escanear el campo en busca de malas hierbas y determinar una ruta. A continuación, el robot Delta coloca el zapper en su posición mediante un motor integrado y un encoder conectado al control principal del robot desbrozador. Los tres robots Delta drylin que se utilizan en cada robot de control de malas hierbas pueden destruirlas simultáneamente. Este proceso basado en la IA de dos robots también puede utilizarse para la pulverización localizada, la fertilización localizada o el control de caracoles y babosas.

Los componentes de igus se distinguen por no requerir lubricación. Las piezas móviles engrasadas (por ejemplo, la transmisión por correa y los cojinetes) podrían obstruirse con suciedad y agua en un campo embarrado, mientras que los polímeros y las piezas de igus están diseñados para funcionar en seco. La asequibilidad, la precisión, la larga vida útil y la fiabilidad de los robots Delta drylin son ideales para estas y futuras aplicaciones agrícolas, según el director general de igus UK, Matthew Aldridge. Ligero y rentable, el robot Delta ha abierto nuevas oportunidades para estos robots en aplicaciones móviles y ha demostrado que esta nueva tecnología puede funcionar bien en un entorno difícil.